martes, 21 de julio de 2015

¿ABSORBER O PRODUCIR CONOCIMIENTO? ESA ES LA CUESTIÓN: GENyo*

El conocimiento es algo más que un conjunto de datos o de información almacenada a posteriori (través de la experiencia o del aprendizaje) o como es común en las escuelas y universidades, por medio de la introspección (a priori). El conocimiento es una apreciación de la posesión de múltiples datos interrelacionados que por sí solos poseen menor valor cualitativo. Tener conocimiento en definitiva, significa poseer un modelo de la realidad...en la mente.


Vivimos en una era de constantes descubrimientos, en un mundo moldeado por la aparición de nuevas tecnologías revolucionarias. Es muy probable que en los próximos cinco días aparezca una noticia sobre el calentamiento global, clonación, fósiles en meteoritos o sobre alimentos creados por la ingeniería genética.

Estos y otros artículos que tratan sobre materiales exóticos, avances médicos, evidencia del ADN y nuevas drogas, se refieren a temas que nos afectan a todos directamente. Como consumidor, como profesional de negocios o como ciudadano, tu deberás forjarte tus propias opiniones sobre éstos y sobre otros temas científicos críticos si es que deseas participar de lleno en la sociedad moderna.

Los temas científicos y tecnológicos dominan cada vez más el diálogo nacional, desde los debates ambientales sobre la desaparición del ozono y sobre la lluvia ácida hasta las amenazas económicas del cambio climático y de las especies invasivas. 

Tener la capacidad de comprender estos debates se ha hecho tan básico como el poder leer. 

Todos deberíamos tener conocimiento científico para poder apreciar al mundo que nos rodea y tomar decisiones personales informadas.

Los educadores tienen la importante responsabilidad de darnos a todos los conocimientos de fondo que nos permitan comprender los cambios rápidos que suceden hoy y en el futuro Y no me estoy refiriendo al conocimiento que necesita absorber una persona con ALTA CAPACIDAD, sino a cualquier ciudadano de este país. 

Hay varios tipos de conocimiento a saber:

CONOCIMIENTO LOCAL

El conocimiento local hace referencia al saber y a las habilidades y  filosofías que han sido desarrolladas por sociedades de larga historia de interacción con su medio ambiente. Para pueblos con amplia cultura como el nuestro, el conocimiento local establece la base para la toma de decisiones en aspectos fundamentales de la vida cotidiana. Este conocimiento forma parte integral de un sistema cultural que combina la lengua, los sistemas de clasificación, las prácticas de utilización de recursos, las interacciones sociales, los rituales y la espiritualidad. 

Son elementos importantes para comprender la diversidad cultural mundial y son la base para el desarrollo sostenible adaptado al modo de vida local.

CONOCIMIENTO CIENTÍFICO

El conocimiento científico es, simplemente, una mezcla de conceptos, historia y filosofía que le permite a uno entender los temas críticos científicos de nuestro tiempo.

El conocimiento científico no es el lenguaje especializado, esotérico y lleno de palabras técnicas usado por los expertos. Tu y yo no necesitamos sintetizar nuevas drogas para poder apreciar el valor de los avances médicos. Tampoco necesitamos calcular la órbita de la estación espacial para poder entender su papel en la exploración del espacio.

El conocimiento científico está enraizado en los principios científicos generales y en los conocimientos básicos sobre la ciencia. El ciudadano con conocimiento científico posee suficientes datos y vocabulario como para poder comprender el contexto de las noticias o de los sucesos diarios.

Si tu puedes entender temas científicos publicados en revistas y periódicos (es decir, si puedes comprender artículos sobre la ingeniería genética o el agujero en la capa de ozono con la misma facilidad con la que comprendes los temas de deporte, la política o las artes) entonces se dice que has absorbido conocimiento científico con un nivel adecuado.


Todo parece congruente, pero desde el punto de vista GENyo* esta definición de conocimiento científico no satisface a nuestros niños con alta capacidad. Creemos que la "educación científica" debe exponerlos al rigor matemático o a un vocabulario complejo. Ellos deben experimentar el sabor de la ciencia “verdadera” mas allá de estar haciendo bobinas de tesla o conexiones eléctricas en las olimpiadas que anualmente organiza el gobierno. 

Porque una cosa es “hacer ciencia" y otra muy diferente es "usar ciencia" y la definición normal de "conocimiento científico" promovida en las escuelas trata solamente con este segundo concepto.

Hay que dejar de hablar de "ellos" y conocerlos: a los niños GENyo* no les basta con leer libros, escriben libros; no les es suficiente saber "que hace" tal o cual artefacto o sustancia, sino "como se hace el aparato y la sustancia". 

Es por eso que tratar de enseñar desde esta perspectiva, es mucho más difícil que proponer un temario y dárselo a un maestro normalista para que busque información y la exponga ante un grupo. El estudio intenso de un campo particular de la ciencia nunca le hará tener un conocimiento científico adecuado. 

Si crees que exageramos, corrobora nuestra teoría: dile a tu hijo que pregunte a su maestro cual es la diferencia entre el ADN y el ARN (uno de los conceptos más básicos de la biología molecular moderna) o cual es la diferencia que existe entre un semiconductor y un superconductor. 


CONOCIMIENTO TECNOLÓGICO

Muy a menudo, el "conocimiento científico" se confunde con el "conocimiento tecnológico", el cual se define como la habilidad de manejar instrumentos de uso diario tales como computadoras o grabadoras de video. 

El verdadero conocimiento tecnológico esta disponible en bancos de propiedad industrial en forma de patentes y modelos de utilidad. La buena noticia es que en México las patentes tienen una vigencia de 20 años improrrogables y los modelos de utilidad tienen una vigencia de 10 años igualmente improrrogables. 

Cuando la patente o modelo de utilidad expira, termina así mismo la protección y la invención pasa a pertenecer al dominio público; es decir, el titular deja de tener derechos exclusivos sobre la invención, que pasa a estar disponible para la explotación comercial por terceros interesados que pueden ser nuestros niños de alta capacidad, tu o yo.

De este modo, muchos de nuestras mentes geniales no requieren inventar, sino saber cuantas y cuales patentes son del dominio público para aprovecharlas.

Son numerosas aquellas, que a pesar de haber sido registradas, nunca fueron comercializadas (90 a 95%). Estas tecnologías representan un activo nacional importante. GENyo* impulsa la economía mexicana, apoyando la creación de empresas de base tecnológica basadas en patentes vencidas. Todo es cuestión de pensar estratégicamente y a largo plazo.

¿Por qué las empresas gastaron dinero para investigar una tecnología y después dejaron la patente en el olvido? Las empresas grandes suelen registrar cualquier avance significativo, pero sólo explota aquel que cumpla con las estrategias de largo plazo de la corporación.


CUAL ES NUESTRA PROPUESTA PARA EL SISTEMA EDUCATIVO NACIONAL

1.-Desde nuestro punto de vista, tanto los niveles de primaria y secundaria deben desarrollar Estándares Nacionales para la Educación en Ciencias enfatizando un modelo investigativo bajo el contexto de conceptos y principios en vez de vocabulario y memorización. El sistema educativo nacional deberá rediseñar sus cursos de ciencias y re-entrenar a los educadores en esta poderosa dirección educativa. 

2.-En las Universidades deberá impartirse un curso que bien podría llamarse “Ideas para hacer Ciencia.” que promueva entre los alumnos la experimentación como base para generar conocimiento científico, exigiéndoles ante todo, pertinencia con los graves problemas sociales y productivos .

3.-Los niños con alta capacidad pueden complementar su formación científica fácilmente si les decimos como: Primero deberán leer y hablar otro idioma o al menos saber como usar traductores de documentos en linea para poder accesar a cientos de libros escritos por científicos y por periodistas científicos. Segundo: existen maravillosos programas de televisión y de radio que exploran los avances más recientes de la investigación científica. Tercero: en el Internet abunda sitios Web que describen y estudian un sinnúmero de tópicos científicos, desde la investigación pura en la exploración astronómica y la física de partículas hasta los aspectos aplicados de las tecnologías médicas, los peligros ambientales, el desarrollo de materiales, el diseño de medicamentos y cientos de otros temas de importancia.

Los niños con alta capacidad deben ser gente capaz, creadora de conocimiento cosa que resulta muy diferente a gente capacitada o que memoriza y usa el conocimiento de otros. 

Siendo que su arquitectura cerebral les confiere la iniciativa necesaria para analizar datos, información, anticiparse a los hechos y actuar, somos nosotros, los adultos interesados en los niños GENyo*, quienes tenemos que ver la forma de reducir dramáticamente su curva de aprendizaje para llevarlos a una intención de evolución propicia y efectiva.

Y nos referimos a algo mas serio que la aceleración de grado.

Todos los adultos que nos decimos "inteligentes" debemos enfocar nuestro talento en tratar de reducir las curvas de su aprendizaje por medio de comunicación presencial o en linea. Esto significa facilitarles la trasferencia del conocimiento actual desde la fuente, de quien sea y donde este.

Ya lo dijimos antes: aprender no es lo mismo que entrenar. 

México aprende cuando su desarrollo se basa en la producción de conocimiento mismo que después se convierte en activo intangible como patente, derecho de autor, registro de marca, franquicia o fondo de comercio; México aprende cuando todas estas experiencias enriquezcan transversalmente a nuestras comunidades, a nuestras organizaciones. México aprende cuando se logra más eficiencia, velocidad y tiempo de respuesta frente a los distintos retos y propuestas que se presentan todos los días.

Es lógico pensar que si al aprendizaje se suma el entrenamiento, el resultado será un nuevo índice de crecimiento exponencial de nuestra gente en un tono más enriquecido.


EL RETO

Como empresario puedo asegurarlo tajantemente: la mayoría de las universidades e institutos universitarios en todo el mundo comparten el mismo secreto: forman estudiantes científica y tecnológicamente analfabetos, incapaces de entender muchos de los temas importantes publicados en los periódicos el mismo día de su graduación.

Por supuesto que ese problema no está limitado a las universidades mexicanas. Basta comparar los resultados de la "prueba enlace" con los de otros países desarrollados. 

El número de mexicanos que poseen un conocimiento científico y tecnológico adecuado (de acuerdo al estándar de esos estudios) es preocupantemente bajo. Los mexicanos de todos los niveles académicos no reciben la base de conocimientos que necesitan para hacer frente a la vida en el siglo XXI.

LA ULTIMA PREGUNTA


Si esto pasa para la población promedio ¿Que le espera a los niños de Altas Capacidades que tiene la capacidad no solo de absorber sino de PRODUCIR el conocimiento nacional? 

La buena noticia es que si tu hijo(a) ya fue diagnosticado por nosotros, ya sabes, ya recibiste indicaciones para potenciar su alta capacidad con base en su hemisferio predominante; si aún no lo has hecho ¿que esperas?

Para eso y más existe GENyo*, dos hemisferios, mil oportunidades.


#soygenyo
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